DISCUSIÓN

Se empleó un robot industrial StaübliRx60, porque de todos los existentes en el mercado es el que posiblemente se puede adaptar mejor a las necesidades de la cirugía laparoscópica. Y es además de muy bajo coste (unos 12.000¤).
El hecho de que el robot responda a órdenes verbales, puede permitir operar al cirujano sin ayudante.
En la sesión de entrenamiento es muy importante que el cirujano tenga la mascarilla quirúrgica puesta, ya que esta distorsiona la voz.
En todos los experimentos se observa como el número de veces que no responde correctamente el robot a las órdenes verbales va disminuyendo conforme el cirujano tiene más experiencia con el sistema.
Aunque en el primer experimento los tiempos globales empleados por el robot son mayores que los del ayudante humano, podemos observar como conforme vamos realizando más experimentos estos tiempos se igualan e incluso llegan a ser levemente favorables para el robot en el último experimento. De hecho, Geis¹ y Johanet² afirman que el empleo del robot acorta los tiempos quirúrgicos.
Distintas ventajas del robot como ayudante laparoscópico han sido mencionadas en la literatura. Los primeros en aplicar esta técnica fueron Sackier³ y Wang en 1993. En 1995 Kavoussi⁴ et al. demostraron que el robot proporciona una imagen más estática que la del ayudante humano, hecho que hemos podido constatar en nuestra experiencia con el robot.
Estos experimentos son los correspondientes a una fase inicial de trabajo en humanos. Al superar correctamente todas las pruebas, se prepararon los documentos y autorizaciones necesarias para su empleo en humanos, iniciándose la fase 3 de ensayos clínicos en el mes de Junio de 2004 en el Hospital Clínico de Málaga. En próximos meses podrán publicarse los primeros resultados.