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RECUERDOS DE LA SECLA. IN MEMORIAM PROF RAFAEL VARA THORBECK

D. Rodero Rodero (Valencia)

 

En el último Congreso de la SECLA, celebrado el pasado mes de Mayo en Madrid, he sabido el reciente fallecimiento de mi amigo el Prof. Rafael Vara Thorbeck. Los medios escritos de comunicación de la Ciudad de Granada han resaltado con detenimiento su curriculum profesional, como la ocupación de la Cátedra de Cirugía de la Facultad de Medicina con solo 33 años, y todo su bagaje en la labor asistencial, docente y de investigación; el tratado de Patología Quirúrgica que ha sido el texto en muchas facultades españolas de Medicina para la enseñanza de la Cirugía y un gran numero de condecoraciones de Estados, Colegios Profesionales, Academias y Sociedades Médicas.

 

Amigo Rafael, se han olvidado de que también eres Socio Fundador y de Honor de la Sociedad Española de Cirugía Laparoscópica (SECLA), fundada en el año 2000 en la Ciudad de Valencia.

 

Personalmente nos conocimos algunos años antes, a través de tu hermano Carlos, en el año 1981, cuando él ocupó la Cátedra de Cirugía del Hospital Clínico de Málaga y yo la Jefatura del Servicio del Hospital “la Fe” de Valencia. En los Cursos que organizamos en el Servicio desde el año 1988, contamos con Carlos, que siempre prestó su colaboración y participación, cuando la temática fue de cirugía laparoscópica, y en la década de los noventa, los complementamos con la realización de operaciones de cirugía en directo por vía laparoscópica y transmitidas al Salón de Actos de nuestro Hospital. Por estas mismas fechas, en el Hospital Clínico de Málaga, Carlos Vara impartía Curso con un programa eminentemente laparoscópico, y uno de los mas importantes participantes por su prestigio profesional era el Prof. Rafael Vara Thorbeck.

 

Desde entonces iniciamos una relación de amistad personal y profesional, mantenida no solo por la “química “que creo surgió entre nosotros desde que nos conocimos y que hemos mantenido, sino también por la afición a la Cirugía Laparoscópica, en unos tiempos de no pocas dificultades para el inicio y puesta en funcionamiento de esta vía de abordaje en los Hospitales españoles, he sido testigo de tu voluntad y entusiasmo en realizarla en el Hospital Clínico de Granada.

 

También fuiste pionero en los Cursos de la Cátedra de Patología Quirúrgica de la Facultad de Medicina de Granada, para la enseñanza de esta nueva cirugía y tuve la suerte y el honor de participar en alguno. En el celebrado en Diciembre 1993, finalizado el programa científico previsto, se celebró un acto en la Academia de Medina y Cirugía de Granada, donde fuimos nombrados Miembros Honoríficos de la mencionada Academia. El Certificado acreditativo que enmarcamos, siempre ha estado en lugar preferente en nuestro despacho.

 

En todos los cursos científicos que organizabas había una Cena de Clausura, en las Cuevas del Sacromonte, y el menú, creo recordar, era “La Olla Podrida”. Tanto el lugar como el ambiente es necesario haberlo visto alguna vez para entenderlo. Pero aquello era posible porque además de buen profesional en la cirugía y la docencia, tus cualidades humanas facilitaban el contacto con las personas, independientemente de su raza, religión y estatus económico (la frase ha quedado muy bien) sabíamos que en tu despacho del Hospital Clínico de Granada, la puerta estaba siempre abierta a cualquier hora, para los habitantes del Sacromonte. Fui testigo aquella noche de cómo te querían y respetaban y se notaba su agradecimiento, no cabe duda de que eran conscientes de las atenciones personales y profesionales que de ti recibían. Lo vivido esa noche forma parte de mis mejores recuerdos y donde estés quiero agradecértelo.

 

También coincidimos en otro acto científico el “XIII Congreso Latinoamericano de Cirugía" y el "VI Congreso Cubano de Cirugía", en el Palacio de Congresos y Convenciones de la Habana, desde el 19 al 24 de Septiembre de 1999, creo que éramos el grupo de españoles mas numeroso, tanto por personas, como por las comunicaciones presentadas, mayoritariamente relacionadas con la cirugía laparoscópica.

 

Después de la ciencia, queda tiempo para las visitas y el disfrute turístico, y en la Habana, con solo pasear por sus calles se experimentan sensaciones distintas. Tu la conocías muy bien. Este viaje, donde coincidimos, no recuerdo qué número hacía para ti, pero quizás de dos dígitos, y como buen anfitrión visitamos algunos lugares emblemáticos de la Ciudad. Hay muestras fotográficas de algunos lugares que vienen a mi memoria, los mojitos de la Bodeguita de Enmedio, con una fotografía del grupo, donde hay un médico cubano, que había estado alguna temporada en tu Servicio del Clínico, y me decía “ los viajes y la estancia en Granada, han sido financiados por el Prof. Rafael Vara" y añadía: "no soy el único, otros compañeros, por el mismo mecanismo, han estado aprendiendo cirugía en el Hospital Clínico de Granada”. Esta era otra de tus virtudes, la generosidad y la cooperación en forma de ayuda incluso económica para enseñar a otros.

 

No quiero olvidarme de recordar el acto final del Congreso y como el Presidente del mismo, nuestro amigo el Dr. Alejandro García Gutiérrez, acepto la invitación para cenar, con el grupo de españoles (creo quería recordar sus raíces de españolidad, era  hijo de emigrantes asturianos) en el restaurante Bar de Oriente. Tuvimos buen ambiente, en correspondencia (ahora se dice “buen rollo“) con la mejor comida, con la que disfrutó mas que ninguno el Dr. García Gutiérrez.

 

No es fácil olvidar las conferencias magistrales impartidas en los dos últimos cursos, realizados por nosotros en el Servicio de “la Fe”, una sobre las eventraciones laparoscópicas y la segunda sobre el cierre de las laparotomías, esta última coincidiendo en el año 2000 con la creación de la Sociedad Española de Cirugía Laparoscópica, donde fuiste elegido Vicepresidente de la primera Junta Directiva que salió de aquella Asamblea General. En los años siguientes siempre pudimos contar con tu colaboración para cualquier actividad relacionada con la cirugía laparoscópica dentro o fuera de la SECLA.

 

Finalmente mi último recuerdo es del año 2007. La noche antes del inicio del Congreso de Granada, y por una invitación tuya, nos reunimos para cenar un grupo de amigos que una vez sentados en la mesa, éramos los iniciadores de la Sociedad Española de Cirugía Laparoscópica. En este ambiente distendido y con tan buen anfitrión, el acto se prolongó hasta bien entrada la noche. Alguien preguntó el motivo de la invitación y dijiste es “una cena de amigos”. Pasado el tiempo tengo la impresión que fue tu despedida de la SECLA, pero esto es una suposición personal, solo tu sabes el motivo de aquella reunión.

 

Termino con un párrafo de una de tus conferencias magistrales, de las muchas que has impartido a lo largo de tu actividad como Profesor Universitario. Decías y copio textualmente, refiriéndote al homenajeado “por tu mentalidad quirúrgica, y vocación docente, eres un gran cirujano universitario, pero eres algo más, un auténtico amigo” y también decías “yo me pregunto señor ¿es que hay alguna verdad por encima del amor?" y oí una voz interior que me dijo: "la amistad". Creo que estas son las grandes cualidades que has tenido siempre, y de las que nos sentimos orgullosos tus amigos.

 

Con un fuerte abrazo donde te encuentres. David.

 

 

 

 

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