DISCUSIÓN
En la actualidad no se discute que la técnica de elección para el tratamiento quirúrgico de la colelitiasis sintomática es la colecistectomía laparoscópica.
La disminución de estancias hospitalarias y comorbilidades, así como de los costes, junto con un mayor bienestar, ha generado un evidente incremento del número de pacientes intervenidos por litiasis vesicular. A ello ha contribuido también la combinación con otras técnicas mínimamente invasivas para el tratamiento de la patología litiásica coledociana.
En la mayoría de los casos son colecciones asépticas que evolucionan de forma subclínica, y que aunque tienden a la resolución espontánea tienen un riesgo potencial de sobreinfección. Se piensa que se deben en unos casos a linforragia procedente del campo operatorio, en otros a mínimas fugas biliares a partir de conductos de Luschka, en ocasiones a episodios de sangrado postoperatorio, y en otros casos a exudado, favorecido por la existencia de quemaduras provocadas por el uso de distintos sistemas de coagulación y hemostasia del lecho vesicular (termocauterio, bisturí harmónico, etc).
Pueden plantear problemas, a veces de difícil solución, acerca de la conducta a seguir si se detectan en un paciente que cursa con clínica febril o subfebril, que puede tener otro origen como una flebitis, infección urinaria, o una infección de alguna de las puertas de entrada de los trócares, etc, etc.
Distinto es cuando se acompañan de pruebas complementarias de imagen que abogan por la existencia de una colección, en estos casos pueden dar clínica y tender a la infección precoz y requerir tratamiento, a veces quirúrgico.
Aunque no hemos encontrado grandes series ni apenas publicaciones en la literatura sobre el problema que nos ocupa, creemos que es bastante común, y que el uso de Tissucol Duo® puede contribuir a evitar la formación de estas colecciones, en principio asépticas, puede ser de utilidad, sobre todo para evitar exploraciones, ingresos, e incluso actuaciones invasivas (laparotomías o drenajes percutáneos) innecesarias.
Por otra parte, pese a haber rastreado la literatura mundial, hemos encontrado publicaciones sobre aplicaciones similares en el campo de la neurocirugía(5), urología(6-8) y cirugía biliopancreática(9-13) o mamaria(14), y siempre para casos complicados durante la intervención con sangrado en sábana, pero en ningún caso referido ni aplicado a la cirugía laparoscópica electiva de la litiasis biliar.